Hoy, 17 de enero, tomarán posesión de sus cargos los nuevos miembros de la Junta de Gobierno del Colegio.

Ello supone que, tras doce años, dejaré el cargo de Decano.

Si bien tuve ocasión de despedirme de vosotros y hacer una glosa de lo que han supuesto estos tres mandatos en la Circular 60/2024, no quiero dejar pasar la ocasión en ésta, mi última comunicación como Decano, de dirigiros este mensaje.

Mensaje que, en primer lugar, ha de ser de agradecimiento. A todos vosotros, a todos los compañeros, que hacéis posible que el Colegio sea lo que es hoy, una referencia en la sociedad zaragozana y aragonesa, con una presencia cada vez más importante como hemos podido comprobar el año pasado con motivo de nuestro 625 Aniversario.

Este agradecimiento es muy especial para todos los compañeros que me han acompañado en las labores de la Junta de Gobierno a lo largo de estos doce años, representados en quienes hoy, junto conmigo, dejan sus responsabilidades en la Junta de Gobierno: Nieves Saiz, Marta Gil y Luis Montes. Su trabajo, su generoso esfuerzo y su eficacia en la gestión colegial, asumiendo la dirección de comisiones como las de Turno de Oficio, Formación y Honorarios, merecen mi sincero reconocimiento y el de todos los compañeros.

Y, lógicamente, he de agradecer a los compañeros que hoy tomarán posesión de sus cargos: Nuria Souto, Virginia Laguna, Javier Sagardoy, Javier Prenafeta, María Pilar Bernal, Ismael Guillén y José Antonio Sanz, encabezados por mi sucesor, Alfredo Sánchez-Rubio, su compromiso con el Colegio al asumir sus nuevas responsabilidades.

Son todos ellos compañeros competentes e implicados en la vida colegial. Muchos de ellos ya han ejercido funciones en la Junta en periodos anteriores y otros han colaborado con diferentes secciones colegiales.

Les deseo toda la suerte del mundo en su tarea, ya que capacidad les sobra. Su buen desempeño redundará en beneficio de todos nosotros.

Me despido ya, agradeciendo de corazón el trato que me habéis dispensado durante este tiempo, orgulloso de haber dirigido mi querido Colegio estos doce años y esperanzado por el futuro que tenemos. Los agentes externos no nos lo han puesto ni lo pondrán fácil, pero tenemos un gran activo: vosotros, los compañeros y compañeras que defendéis a vuestros clientes y formáis parte indispensable del funcionamiento del sistema de justicia y el Estado de Derecho.

Nuestra Junta, con vuestro apoyo, conseguirá mantener el Colegio en el lugar que le corresponde y, si puedo servir con mi experiencia en esta labor, sabéis que, modestamente, podéis contar conmigo para lo que sea menester. El Colegio, mi apreciado Colegio, siempre me tendrá a su disposición.

Os quiero. Un cordial y afectuoso saludo.

EL DECANO
Antonio Morán Durán