Para conseguir noticias del pasado del Colegio hemos tenido que indagar y buscar en torno a la figura del santo patrón, San Ivo, que nos ha servido como referencia histórica.  La celebración de su festividad en el seno de cofradía-colegio ha generado la documentación más antigua y directa de que dispone nuestra historia: en 1545 la Cofradía adquirió un censal de la villa de Erla para que con sus rentas, 110 sueldos jaqueses, pudiesen celebrarse con dignidad, y sin quebranto económico del Decano, la fiesta anual colegial. 

          Ese evento festivo anual seguimos hoy celebrándolo, como tiempo de confraternización, entretenimiento y relación personal entre todos los abogados zaragozanos. Ese espíritu de fiesta y participación es el que debe presidir nuestra celebración de mayo, lo que hace actual la mayor parte de las virtudes de servicio y atención a los demás, especialmente a los menos favorecidos, que tuvo en su día Ivo de Hélory y que también mantenemos hoy los abogados.